Prevenir fraudes en compras navideñas
Con la llegada hace unos años del Black Friday como reclamo publicitario para incentivar compras antes del periodo navideño, se vio modificada la costumbre comercial existente hasta entonces de limitar las rebajas a dos periodos: periodo estival (rebajas de Julio) y periodo post navideños (rebajas de Enero).
A ello debemos sumar la irrupción del e-commerce como el proceso mediante el cual la compra, venta, pedido y pago de productos o servicios se hace on line a través de diversas plataformas. Ello también ha supuesto que se hayan visto modificadas las formas y medios tradicionales de pago lo que ha supuesto una revolución digital a la que han debido adaptarse a marchas forzadas las entidades
bancarias y crediticias.
Si bien los distintos medios de pago por vías telemáticas alternativas al pago tradicional en efectivo ha supuesto una comodidad y avance tecnológico al dotar de mayor rapidez y agilidad las transacciones comerciales, es imperativo tomar medidas de protección tanto por los usuarios como por las entidades bancarias a fin de adoptar la cautela necesaria para evitar posibles fraudes cibernéticos (conocidos coloquialmente bajo el anglicismo Phishing)
Así, según una reciente encuesta, si bien el 85% de los españoles teme ser víctima de delitos durante el periodo de compras navideñas, apenas un 38% conoce las estrategias adecuadas para resguardarse de estos riesgos. Lo más sorprendente es que, por grupos demográficos, el más susceptible a caer en estos engaños es el de los jóvenes, quizá por cuanto sean en la práctica los que más transacciones electrónicas
realizan.
Cautelas a adoptar en casos de comercio electrónico (e-commerce)
La publicidad on line que ofrezca descuentos agresivos y tarjetas regalo puede ser fraudulenta. NUNCA se debe proporcionar datos personales o bancarios en respuesta a promesas de cupones o recompensas, pues dicha información personal esencial podría ser utilizada fraudulentamente por hackers (estafadores cibernéticos). Por ello, es conveniente asegurarse previamente que la publicidad recibida proceda de fuentes oficiales y/o de la página oficial.
Una forma para obtener veracidad de esos descuentos, rebajas u ofertas es comprobar on line las opiniones de otros usuarios o la calidad técnica del sitio web (con frecuencia las páginas web fraudulentas ofrecen un diseño técnico poco profesional e incurren en errores ortográficos o gramaticales). Una de las medidas fundamentales para corroborar que se trata de una página segura es verificar que la URL comience con ‘HTTPS’ y no simplemente con ‘HTTP’. La ‘S’ final indica que la conexión es segura y que tu información está cifrada.
Es conveniente actualizar regularmente el software del sistema operativo, los navegadores y los programas de seguridad de los distintos sistemas operativos que utilicemos en nuestras transacciones telemáticas así como mantener la configuración de actualización automática activada.
Una forma habitual por la que los hackers obtienen datos bancarios es interceptando correos electrónicos que contienen datos bancarios antes de que lleguen a su destinatario, de manera que modificando los datos de la cuenta corriente indicada por el usuario por otra del ciberdelincuente a donde se realizará finalmente la transferencia. Por ello, es conveniente que la información de contacto, dirección y número de teléfono, estén actualizados en todos los sitios web donde se realicen compras.
Recomendaciones para pagos y transacciones bancarias electrónicas.
Actualmente hay una gran variedad de modalidades telemáticas de pago, siendo algunas de ellas más seguras que otras. El sistema de pago Bizum ofrecido por diversas entidades bancarias puede dejar expuestos los datos bancarios del usuario en el momento en que este visualiza la operación a través de su dispositivo móvil por lo que se recomienda realizarla fuera de “Miradas ajenas”.
Se recomienda no confiar en vendedores que únicamente admiten transferencias o pagos a través de Bizum, pues puede ser indicativo del fraude conocido como “Bizum inverso” que consiste en que el delincuente obtienen dinero de un usuario haciéndole creer que está recibiendo un pago cuando en realidad está autorizando una transferencia de dinero desde su cuenta. Esta estafa ya ha sido alertada por los agentes y cuerpos de seguridad del Estado encargados de los delitos informáticos como un nuevo medio de fraude cibernético en auge.
Hacemos una mención expresa a los conocidos como códigos QR que si bien son herramientas de accesibilidad rápida muy utilizadas, pueden ser fraudulentos. También hacemos mención expresas del conocido como código QR (Quick Response) que, como su nombre indica, es un código de respuesta rápida que permite al ser escaneado acceder a la información que contiene. Este código es conocido habitualmente por ser utilizado en muchos establecimientos hosteleros para descargar la carta de menús pero también a través de este código se puede pagar compras desde el móvil de forma rápida y sin la necesidad de manipular dinero. Por ello, para evitar riesgos, es conveniente configurar el dispositivo con el que se escanee el código QR para que exhiba previamente la URL a la que el código redirecciona.
En el caso de transacciones bancarias, es recomendable emplear una VPN para cifrar y proteger las conexiones en línea, y activar la autenticación de dos factores para agregar una capa adicional de seguridad en las cuentas bancarias.
Las contraseñas personales de acceso deben ser complejas, distintas, evitando utilizar datos personales de fácil acceso tales como fecha de nacimiento o secuencias 123456. Una contraseña fuerte debe tener al menos 12 caracteres y debe incluir una combinación de letras, números y símbolos.
Nuestro despacho cuenta con profesionales especializados en derecho bancario,
delitos informáticos y phishing, estando encantados de poder solventar todas las
cuestiones que se puedan plantear en dichas materias.
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